¿El gobierno del cambio?

Hace seis años cuando Vicente Fox fue ganador de la contienda por la presidencia de la republica, siendo portavoz de todas las necesidades y aspiraciones más profundas del pueblo mexicano, el aún hoy presidente hizo muchas promesas que hoy a pocos días de que termine su mandato se observan como simples habladurías y mentiras que nunca llegaran a concretarse.

Vicente Fox es un gran mentiroso, además del fraude electoral que cometió el pasado 2 de julio para asegurar el poder a su partido de militancia; al final de su gobierno tiene que admitir con toda la vergüenza que incumplió el pacto con el pueblo que le dio el triunfo y no resolvió muchas de las promesas hechas en campaña.

Fox no resolvió el caso del FOBAPROA manteniendo impune el mayor fraude hecho contra el pueblo mexicano por unos cuantos a los que no quiso descubrir. Fox no resolvió el problema de los indígenas en Chiapas y en otros estados como en Oaxaca, tal y como había prometido que lo haría en 15 minutos. Fox no cumplió con la promesa de resolver los asesinatos de las muertes en ciudad Juárez y ahora resulta que monseñor Abascal se atreve a pedir disculpas con todo el cinismo del mundo a las familias de las asesinadas por hacer caso omiso a sus demandas. Fox no mejoro las condiciones de vida de los mexicanos, muy al contrario el desempleo creció en un nivel de los más altos.

En pocas palabras, en el sexenio de Fox poco se hizo por aquellos que confiaron su voto y sus esperanzas por un cambio verdadero en la política nacional y por si fuera poco aún nos esperan seis años más de este panismo.